10 de noviembre de 2023

La logística verde, desafíos y sostenibilidad

  Se entiende por Logística verde o Green Logistics “los esfuerzos para medir y minimizar el impacto ambiental de la actividad logística”. El adjetivo ‘verde’ engloba acepciones y cuestiones interrelacionadas entre sí, como la ecología, la sostenibilidad, la responsabilidad corporativa, etc., todas ellas, incluso en estos momentos de crisis, de actualidad en la gestión de empresas contemporánea.

  Las empresas eligen “volverse verdes” porque finalmente les supone una ventaja competitiva y un mejor posicionamiento en el mercado gracias a una mejor percepción por parte de sus clientes. La logística verde integra: respeto ambiental, sensibilidad social y funcionalidad económica, y pretende crear un valor de empresa sostenible, balanceando las eficiencias económica y medioambiental.

  Para cualquier empresa, independientemente del sector, estos son los cuatro puntos principalmente a tratar si decide emprender un giro hacia una logística verde:

• Uso de materia prima.
• Transporte verde.
• Reciclado de desechos.
• Uso de almacenes verdes.

  Destaca entre estos aspectos el segundo punto, un transporte ecológico que principalmente se entiende como la reducción de la congestión del tráfico, especialmente en las zonas urbanas, lo que lleva a grandes beneficios para el medioambiente con la reducción de la contaminación, pero sobre todo para la empresa en el ahorro de costes de transporte.

  El reciclado es el segundo aspecto más importante para una empresa con logística verde, ya que debe trabajar en el procesamiento de todos los productos que considere obsoletos o que ya no le sirven para su producción o venta. Por supuesto, la posibilidad de recuperación de un producto u otro no es igual, y los costes derivados tampoco, pero es un punto importante a la hora de que una empresa reduzca su emisión de CO2, por lo que es imprescindible trabajar en ello para conseguir una logística verde.

  Esta reflexión es perfectamente extrapolable al resto de procesos que componen la cadena logística: almacenaje, gestión de inventarios, manejo de materiales, etc. El coste de estas actividades, tradicionalmente definido en términos pura y exclusivamente monetarios, se amplía pues en nuestros días a otros costes externos de logística, asociados con el cambio climático, la contaminación atmosférica, el ruido, la vibración, los accidentes, etc.

  Por citar un par de ejemplos representativos, IKEA ha eliminado los pallets de madera de toda la cadena de suministro, sustituyéndolos por paletas de papel/cartón, y las soluciones de DHL Global Forwarding permiten contabilizar y gestionar sus emisiones de CO2, con la presentación de informes de huella de carbono sin parangón en su sector.

  Se espera que paulatinamente, y gracias al efecto “tractor” de estas grandes empresas, este modelo de gestión se generalice y todos lo agradezcamos por un futuro más sostenible.

Logística verde: ¿Cuáles son sus ventajas y cómo se puede aplicar?

  En los últimos años, el cuidado del medio ambiente se ha convertido en una gran preocupación para la sociedad. Esta búsqueda de mejorar la huella ambiental, con el objetivo de lograr un crecimiento económico sostenible, se aplica en particular al sector logístico, con el desarrollo de la logística verde.

  Cada vez más empresas intentan combatir esta creciente preocupación reduciendo el impacto medioambiental de su cadena de suministro. Sin embargo, estos cambios suelen presentar a las empresas un desafío: ¿Cómo puedo ser más respetuoso con el medio ambiente sin afectar mi negocio?

  Esto se consigue mediante cambios más o menos sustanciales en la actividad logística de una empresa, ya sea mediante la elección de proveedores, infraestructuras, optimización del espacio de almacenamiento o automatización. Existe una amplia variedad de soluciones para combinar una logística eficiente y un desarrollo sostenible.

  Aunque la implementación de la logística verde implica cambios en el funcionamiento de la empresa y por tanto gasto de tiempo y dinero, estos cambios pueden resultar muy beneficiosos para la empresa.

  Implementar una logística verde puede ser positivo para las empresas por varios motivos:

*Contaminación reducida:

  Sobre todo, el principal beneficio de la logística verde es la reducción de la contaminación generada por la empresa. Esto beneficia no sólo a la propia empresa, sino también a la sociedad en su conjunto dada la situación medioambiental actual.

*Costes de transporte reducidos:

  La logística verde ayuda a reducir la distancia y el número de operaciones de transporte de mercancías, especialmente aquellas que utilizan vehículos de combustión, que emiten gases de efecto invernadero nocivos para el medio ambiente. Como resultado, las empresas pueden realizar ahorros esenciales y al mismo tiempo reducir la contaminación.

*Menores costos de embalaje:

  La logística verde implica el uso de envases o materiales biodegradables o reutilizables. Aunque son más caros de comprar que los materiales y componentes de un solo uso, los materiales reciclables pueden ahorrar dinero a las empresas a largo plazo. Estos incluyen: cartón en lugar de paletas de madera, películas plásticas reutilizables, etc. Los envases representan casi la mitad de la contaminación plástica del mundo y la mayor parte nunca se recicla. Por eso es importante utilizar este recurso correctamente.

*Mejor imagen:

  La logística verde permite a las empresas adoptar un enfoque eco-responsable, lo que resulta especialmente beneficioso para su imagen. Ya sea a los ojos de los proveedores, los clientes o las partes interesadas en general, la reputación “eco-responsable” de la empresa es un activo que vale la pena explotar. Puede ser una forma de cumplir con los requisitos ambientales de los clientes B2C, que pueden verlo como una garantía de calidad, o como una forma de satisfacer las demandas de los clientes B2B, quienes a su vez aplican una logística verde y buscan proveedores respetuosos con el medio ambiente.

*Pérdidas reducidas:

  También reduce las pérdidas de mercancías o materias primas del almacén. De hecho, no desechar las materias primas no utilizadas para reciclarlas o reutilizarlas ahorra dinero a la hora de reponer materias primas.

*Automatización de almacenes:

  La logística verde también pasa por la automatización de los almacenes. La implementación de procesos automatizados ayuda a aumentar la eficiencia logística de una empresa y ahorrar tiempo y dinero. Por ejemplo, la instalación de un sistema de gestión de inventario permanente con software WMS ayuda a reducir las pérdidas provocadas por mercancías que han llegado a su fecha de caducidad. La instalación de un almacén 4.0 (almacén automático) es, por tanto, beneficiosa para todos, tanto desde el punto de vista medioambiental como económico, y responde perfectamente a las exigencias de una logística verde eficiente.

Fuente: www.seas.es / ar-racking.com

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